domingo, 31 de agosto de 2014

Escalada Peña Sirio (Espolón de Peña Sirio)

Espolón de Peña Sirio 
190 metros 6a+/A0


¡Siiiii!, por fin Peña Sirio, parecía que no eramos nadie sin haber subido a todo lo alto; ¿como, que no habéis hecho Peña Sirio?. Pues si ahora si, siempre estaba allí mirándonos, desafiándonos, dominando  todo el paisaje de la "Pedri ", joder lo que nos ha costado, que si la aproximación es dura, que peor es la bajada. Pues todo eso es verdad, pero la recompensa es grande, muy grande, por lo menos para nosotros. 

El día comenzó con el cafelito de rigor y con la vista del temido Peña Sirio al fondo, pero estábamos decididos.


Y la puñetera subida, que comienza cuando llegamos al cerdito (ojo, que está la subida en ese sitio, pero hay que encontrarla)  se empina y se pierde por momentos.


Viki comienza, asegurando con un lazo a un tornillo viejo que hay a la entrada de la fisura, hay que hacerlo, ya que bajo sus piernas hay unos cuatro metros y te puedes calzar una leche del ocho.



Luego el corto largo (15 metros), se da fácil y se llega a una "U" donde montamos la primera reu.


Aquí estoy yo muy valiente, haciendo la travesía a la izquierda después de asegurarme en la primera chapa de "Maldita vecindad", y preguntándome que si, esto es Vº, pero no te caigas.

 


Y cuando llegas a las setas, respiras como si fuera un 6A de esos chungos.


No hay posibilidad de protección en las setas, hasta que llegas a una fisura diez metros mas arriba y puedes meter  un friend mediano, luego te paras y respiras, pues aunque es muy fácil, la leche ahora es del ocho y medio.
Abajo Loli pasando la travesía y llegando a las setas.


Vistas ya espectaculares con el "Canchal" al fondo.


La segunda reunión es cómoda, como todas las de esta vía, y podemos ver el siguiente largo, que parece el cono de un volcán.


Salida a la izquierda en dirección a las dos únicas chapas de este fácil largo.


Loli llegando a la tercera reu, ya con un patio espectacular, como en toda la vía, vais a flipar con las vistas.


loli asegura a Viki en el cuarto largo, un poco más complicado que el anterior, con algunos pasos de Vº y chapado donde está lo mas complicado.




Viki en los canalizos de Vº.



Viki haciéndose el paso de 6A+, que está muy bien chapado y si quieres se puede acerar, pero aún así hay que apretar un poco, pues pasado la tercera chapa afloja un poco y en pocos metros llegamos a la cima.


Unos tres o cuatro metros a la izquiera de la reu, hay unos escalones tallados y una chapa vieja, donde el paso no sube Vº.


Viki en la cima pasando la fisura que divide la cima, y donde podemos encontrar el rapel volado de 15 metros de la cara norte.







Pequeño, pero espectacular, luego mirando al rapel y a nuestra izquierda, veremos un puente de roca enorme, lo pasamos debajo, al otro lado hay una instalación de rapel con dos anillas, tiene unos cincuenta metrazos verticales de verdad, pero te evitas el destrepe que tanto miedo da a muchos.


Al bajar del rapel veréis un camino a la derecha que rodea el bloque que veis abajo, pues hay que pasarlo por su izquierda, y bajar la placa que estáis viendo.


Esta es la placa vista desde arriba, y que nos deja a pie de vía, ojito con
resbalarse, pues te la puedes dar para la izquierda, para la derecha y para el frente.
Luego viene el resto de la puñetera bajada hasta Cantocochino.
Buffffffff, que agusto nos hemos quedado, Siiiiiiii, ya hemos hecho Peña Sirio.



domingo, 24 de agosto de 2014

Escalada en Riglos Aguja Roja


Aguja Roja 130 metros Vº
Escalera hacia el cielo


Para nosotros quizás sea una de las más bonitas escaladas que se puedan hacer en Riglos, esbelta, atlética y divertida. Dicen que las lagrimas son las mensajeras de la tristeza pero también del amor y de la felicidad, pero para nosotros las manos que tocan la roca, son las mensajeras de nuestra intención de llegar a tocar el cielo, de abandonar la tierra, y agujas como la roja son como una canción de Led Zeppelin, nuestra escalera al cielo. 


La verdad es que somos unos románticos de la montaña, somos de ésos que saludan, que dan los buenos días y que se prestan a ayudar cuando pueden etc. etc. Somos raros y lo sabemos, pero en sitios como este "el cielo queda tan cerca" que casi nos deja tocarlo.



El primer largo siempre se me resistió bastante, mi encabezonamiento de no abrirme de patas para superar el desplome que te encontrarás si no lo haces, no como mi amigo Lluis que en la otra cordada (somos dos cordadas) y en la foto de mas abajo, podéis ver que lo hizo mucho mejor que yo. Solo hay dos chapas, por lo que da un poquitin de miedo.



Pasado el puente de roca la cosa se pone vertical de verdad, pero las chapas están en su sitio y aunque va desplomando ligeramente, los agarres son buenísimos, abajo estoy saliendo del puente de roca hacia la segunda reu, también con dos anillas gordas, y marco en verde el camino a seguir, ya que en ese punto te encontrarás con algunas vías al lado, que te pueden confundir.



Aquí esta Lluis encabezando la segunda cordada y llegando a la segunda reu (cómoda).



Arriba Viki en el puente de roca de la primera reu, esperando a subir, abajo yo ya voy de camino a la tercera reu (menos cómoda y con una sola anilla). Se van pasando los pequeños desplomes con muy buenos agarres, con ambiente y disfrutando.





Viki llegando a la segunda reu. En estos sitios se disfruta, se vive, se rie, pues para eso hemos venido.






Arriba Loli en la cuarta reu (cómoda) y en las siguientes superando la chimenea de entrada a esta reunión, donde nos juntamos todos.



Loli en la cuarta reu y bajo ella Viki y Lluis en la tercera reu, pues por aquí hay que bajar luego.






Aqui estoy comenzando el último largo de subida, dos chapas y reunión en cable de acero, junto al árbol que veis arriba, pero muy fácil.




Viki en la tercera reu vista desde la cima, y esperando a subir.



Lluis llegando arriba y debajo asegurando a Viki .



Y por fin comienzan los vertiginosos rapeles, el primero hasta la cuarta reunión.



El segundo hasta la segunda reu, y luego al suelo.
¡Que pena! siempre que hemos subido al cielo nos encontramos en el suelo.
¡Lo que ha sido será, y lo que será ya ha sido!